Esquejes de rosal | Cómo podar un rosal

Esquejar es un procedimiento que se utiliza para conseguir una nueva planta partiendo de un rosal. Lo cierto es que con este proceso agarrarán la gran mayoría de las estanquillas… pero hay que hacer una consideración inicial antes de introducirnos en el maravilloso mundo de los esquejes de un rosal: si hay una rosa que te gusta, y quieres que se multiplique enraizando un esqueje, no es precisamente la mejor opción.

Debes considerar que el estaquillado puede no ser muy resistente a las condiciones extremas (por ejemplo, a las temperaturas frías del invierno, a un exceso de agua, a las sequías), a las plagas, cómo a los gusanos blandos redondos). Necesitará de muchos cuidados y vivirá menos años.

Un error muy común es pensar que las rosas que compramos se han obtenido a través de esquejes de rosal, pero nada más lejos. En lugar de ello se injertan en patrones, ya que de esta manera se consiguen los mejores resultados.

Si vas a multiplicar tus rosales por esquejes vas a lograr unas flores impresionantes, pero debes tener en cuenta los puntos en contra que ya hemos descrito.

¿Quieres saber cómo hacer esquejes? Identifica los tipos de rosal que quieres esquejar y luego sigue leyendo.

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¿Cómo hace esquejes de un rosal? Paso a paso

 

  • Estación del año: Las estaquillas se deben de tomar y plantar en la estación otoñal. Nuestra recomendación es que los almacenes en musgo turboso y que se mantengan a una temperatura de unos 4ºC. Finalmente los podrás plantar de cara a la próxima primavera.
  • Selección: La elección de los vástagos es muy importante (no podemos elegir lo primero que encontraremos para plantar esquejes de rosal). Estúdialos en verano y elige aquellos que se hayan desarrollado mejor, que hayan dado flor (aquellos que tienen un grosor de entre los 6 y 10 milímetros son la mejor opción). El problema de elegir un brote sin flor es que son menos vigorosos, por lo que será más difícil que agarren.
  • Tratamiento: Haz cortes de una longitud de entre los 20 y 25 cm. Debes prestar atención a la punta del esqueje, asegurándote de que la has cortado en bisel, por encima de la zona del brote que apunte hacia el exterior. Acaba con las hojas y brotes para evitar que se acumule mucha transpiración (y es que esto las podría resecar).
  • Hormonas: A continuación debes de tratar la base con hormonas de enraizamiento; la forma más recomendada de hacerlo es comprando ese característico polvo blanco que se comercializa en forma de tarritos. Lo cierto es que este paso para conseguir esquejes de un rosal no es obligatorio, pero si muy recomendado. Si lo haces, la posibilidad de que agarre será mucho mayor.
  • Maceta: La elección de la maceta es mucho más importante de lo que parece. Debes clavar los esquejes en macetas que tengan una mezcla de arena y turba, introduciéndolos en una profundidad de entre los 12 y 15 cm. Además, los esquejes de rosal deberían de estar separados entre ellos en torno a unos 8 cm.

Elige una maceta que te permita trabajar con espacio.

En el momento en el que se hayan presentado raíces abundantes, habrá que individualizar cada esqueje en macetas solitarias.

  • Condiciones: El sustrato debe estar húmedo en todo momento, evitando el sol directo. Lo cierto es que es posible plantar esquejes de rosal en agua, aunque el proceso será mucho más laborioso. Asegúrate de mantener una temperatura que esté comprendida entre los 18 y los 21ºC.
  • Injerto: Una vez que llegue el mes de marzo, si todo ha ido bien, la planta habrá brotado y habremos conseguido nuestro objetivo. Aunque esto no quiere decir que hayamos terminado ni mucho menos, ya que en ese momento habrá que proceder con el injertado. También podemos esperarnos hasta los meses de octubre – noviembre para hacerlo. Será ya en diciembre o enero cuando se despuntará la planta.

¿Plantas esquejes de rosal en patata?

¿Es posible cultivar rosales con la ayuda de patatas? Si. Y es que las patatas pueden ayudar a conseguir que los esquejes de un rosal tengan la humedad necesaria para desarrollar raíces sanas. Otra de las ventajas de este método es que se puede usar en cualquier momento del año, aunque es mejor que te esperes a que la temperatura sea más bien fresca.

También te enseñamos a saber cómo hacer esquejes de rosal en patata:

  • Empieza cortando un esqueje sano, asegurándote de que no tenga más de un año. En relación al largo, este debería de ser de un máximo de 25 cm. Ten en cuenta que no vas a utilizar los esquejes de forma inmediata, si no que los debes de guardar en una bolsa de plástico.
  • Ve quitando las hojas marchitas hasta que alcances aquellas que estén sanas. Aprender cómo podar un rosal no tiene ningún misterio, pero habrá que tener las herramientas adecuadas.
  • Llena una maceta con un sustrato de calidad y añade un poco de agua para que quede humedecido.
  • Coge la patata y haz un agujero lo suficientemente grande como para poder introducir los esquejes de un rosal. Puedes valerte de una herramienta afilada, cómo un destornillador.
  • Coloca un poco de enraizador en la punta del esqueje y acaba con el exceso.
  • Utiliza una cuchara para cavar un pequeño agujero en la tierra (asegúrate de que es lo suficientemente grande como para que quepa la patata).
  • Entierra la patata y cúbrela de tierra. Lo único que debe sobresalir es el esqueje.
  • Sobre la base del mismo coloca una botella limpia. Esta botella proporcionará las condiciones que el esqueje necesita para crecer.
  • Ya lo tienes todo listo. Lo único que tendrás que hacer es colocar la maceta en un lugar cálido que esté lejos de la luz solar. Saca todos los días la botella durante algunos minutos para que el esqueje pueda respirar. Además, asegúrate de que la tierra esté siempre húmeda hasta que empiecen a aparecer los primeros brotes.

Con estos métodos podrás plantar esquejes de un rosal sin complicaciones.